¿Quieres conseguir un jardín perfecto y mantener tus plantas bien cuidadas? Pues debes saber que un buen abono para plantas muchas veces es la clave. Y es que las plantas necesitan una serie de nutrientes para crecer sanas y fuertes: por eso es necesario enriquecer el sustrato con abono. En este artículo hemos preparado una mini guía para que conozcas los distintos tipos de abono y en qué casos aplicarlos.
¿Qué tipos de abonos existen y cómo se aplican?
El abono se puede presentar de muchas maneras, por eso hay abonos para plantas con aspectos tan diferentes entre ellos. A continuación te explicamos las características de cada uno:
Enmiendas orgánicas
- Particularidades: lo que hace este tipo de abono es sobre todo mejorar la estructura y la composición del sustrato. Está compuesto de materia orgánica vegetal y animal descompuesta y esto es lo que hace que aporte nutrientes a las plantas.
- Cómo se aplica: este abono para plantas se debe aplicar en el fondo removiendo la tierra o en la superficie, dependiendo de las necesidades de la planta. En los tiestos y jardineras se aplica en la superficie sana un poco de enmiendas orgánicas. En cambio en el caso de la plantación de árboles se mezcla con la tierra, en este caso debe suponer entre un 3% y un 5% para que no haga el efecto contrario.
- Cuándo aplicarlo: normalmente se aplica en los meses de otoño e invierno, ya que ayuda a proteger las raíces de las heladuras. La aplicación de las enmiendas orgánicas se realiza dos veces al año.
Granulados
- Particularidades: este tipo de abono para plantas se presenta en forma de gránulos que se esparcen por la tierra y que liberan nutrientes. Estos pueden ser rápidos o lentos, los primero hacen la liberación en 4 o 6 semanas y los segundos pueden durar hasta 12 meses.
- Cómo se aplica: los abonos granulados se aplican en la superficie y se deja que actúen disolviéndose con la humedad.
Cuándo aplicarlo: seguir las indicaciones del fabricante.
Solubles
- Particularidades: Son una alternativa a los líquidos, pero éstos son más agresivos, por lo que se debe ir con más cuidado a la hora de dosificarlo, sobre todo con las plantas pequeñas.
- Cómo se aplica: Los abonos solubles están presentados en forma de polvos que se disuelven en el agua de riego.
- Cuándo aplicarlo: seguir las indicaciones del fabricante.
Bastones y varitas
- Particularidades: Son de los más cómodos y duraderos.
- Cómo se aplica: El abono de bastones y varitas se presenta como unos clavos que se introducen en la tierra y liberan los nutrientes de forma lenta, durante 2-3 meses. Las dosis las marca el fabricante según el diámetro de la maceta.
- Cuándo aplicarlo: Estos abonos para plantas se aplican durante el periodo vegetativo hivernal a las plantas que florecen en primavera y verano.
Líquidos
- Particularidades: Este tipo de abonos para plantas tienen un efecto más rápido. Es la mejor opción de abono para las plantas de interior, ya que si respetan las dosis es difícil equivocarse.
- Cómo se aplica: Se aplican disueltos en el agua del riego.
- Cuándo aplicar: El abono líquido se aplica de 7 a 20 días durante la primavera y el otoño, y respetando el ciclo de la planta se hace una parada en invierno y verano, cuando ésta está luchando contra las temperaturas y durante el periodo vegetativo.
Es cierto que existen muchos tipos de abonos para plantas: por eso es muy importante que escojas el que mejor se adapte a las necesidades de tus plantas. Y es que el abono que se debe aplicar va siempre en función del tipo de planta, su ciclo, hasta su tamaño y su situación.
No hay comentarios
Todavía no hay ningún comentario en esta entrada.
Comparte tu experiencia