Ya no tendrás que buscar el interruptor a oscuras. Y, si no estás en casa, la luz se encenderá cuando alguien se acerque. ¡Lleva esta tecnología a tu casa!
Instalar un sensor de movimiento es una fantástica medida de seguridad para el hogar. Estos dispositivos encienden automáticamente la luz cuando detectan alguna presencia, y contribuyen así al ahorro de energía. Te contamos cómo elegir el más adecuado y cómo instalarlo, paso a paso.
¿Qué es un sensor de movimiento? Funcionamiento y ventajas
Los sensores de movimiento son dispositivos electrónicos que detectan presencias móviles dentro de su radio de acción. Estos sensores están conectados a otros elementos (normalmente luces, pero también puede tratarse de sistemas de climatización o calefacción), que se encienden cuando el mecanismo capta el movimiento cercano y se apagan cuando termina el tiempo de programación del aparato. Son muy interesantes como medida de seguridad, pero también para ahorrar energía y dinero de forma fácil y económica.
Para instalar un sensor de movimiento sin miedo a equivocarte, te enseñamos qué tipos de dispositivos existen:
- Sensores por infrarrojos. Son los más habituales. Cuentan con un elemento que proyecta un haz de rayos infrarrojos invisibles. Cuando un cuerpo se interpone en el haz, el dispositivo detecta el cambio de temperatura de forma inmediata. Entonces, cierra el circuito eléctrico y provoca que la luz o el aparato conectado a él se encienda.
- Sensores por ultrasonidos. Su funcionamiento es similar al del radar. Estos aparatos emiten una onda ultrasónica que va trazando un recorrido por el área a cubrir. Cuando la onda “choca” con una presencia, rebota y regresa al sensor. Entonces, este cierra el circuito eléctrico, encendiendo los aparatos.
Las ventajas de instalar un sensor de movimiento son más que evidentes. Lo más habitual es colocarlos en el exterior de las viviendas, normalmente junto a la entrada, para que se activen cuando llegues y como medio disuasorio para los intrusos. Son una fantástica medida de seguridad pasiva, y resultan muy prácticos:
- Evitan perder tiempo buscando el interruptor a oscuras.
- Ahorran energía, ya que se evita que las luces permanezcan encendidas más tiempo del necesario.
- Muchos diseños actuales se integran en la decoración y simulan interruptores o apliques, y son tan estéticos como discretos.
Cómo instalar un sensor de movimiento paso a paso
Instalar un sensor de movimiento es un trabajo sencillo. Es importante elegir el lugar correcto y colocarlo en el punto exacto donde mayor sea su alcance. A continuación te contamos cómo se realiza la instalación y cómo ajustar los parámetros.
Herramientas y materiales:
- Sensor de movimiento
- Lápiz o rotulador
- Cable de fase
- Taladro atornillador
- Brocas
- Tacos y tornillos
Pasos:
El sensor se debe instalar en una zona de paso, a 1,2 m de distancia del suelo. Conviene colocarlo a 2,5 m de cualquier pared contigua. Es necesario que esté cerca de una fuente de luz (aplique o lámpara de techo), ya que tendrá que ir conectado a ella.
- Desconecta la corriente eléctrica.
Desactiva el interruptor de la iluminación en el cuadro de mando y distribución.
- Presenta el sensor en su lugar.
Marca los agujeros a taladrar con un lápiz o un rotulador.
- Realiza las conexiones eléctricas antes de colocar el dispositivo en la pared.
El sensor irá conectado al interruptor y al punto de luz, entre ambos. Conecta el cable de fase (negro o marrón) procedente del interruptor con el borne de fase del sensor, marcado con la letra L. A continuación, conecta el cable de fase que llega del punto de luz al mismo borne (hazte con un metro de cable de fase por si tuvieras que añadir un trozo). El cable neutro (N) no tendrás que tocarlo, ya que sale del punto de luz para retornar al circuito. Y recuerda: para que el sensor funcione, el interruptor tendrá que permanecer encendido.
- Taladra los agujeros que has marcado con una broca para pared, del número 6.
Inserta los tacos y fija el sensor con tornillos.
- Con los mandos del sensor, ajusta los parámetros de funcionamiento.
Activa el encendido automático (la luz se encenderá cuando el dispositivo detecte una presencia), ajusta el tiempo de encendido con el temporizador y gradúa la intensidad de la luz.
- Vuelve a conectar la corriente eléctrica y comprueba el funcionamiento del sistema.
- Para terminar de instalar el sensor de movimiento, coloca la carcasa, el marco y el embellecedor.
No necesitan tornillos: llevan unas patas que ejercen presión y sujetan el conjunto.
Tipos de sensores de movimiento: uno para cada necesidad
Si quieres instalar un sensor de movimiento, pero prefieres no intervenir en la red eléctrica, hay otras opciones. Puedes elegir un detector con funcionamiento a pilas que se conecta a la red WiFi del hogar. Estos dispositivos se integran con el resto de los elementos de la red; puedes activarlos mediante asistentes de voz y programarlos a través del teléfono móvil.
Otra opción muy fácil de instalar son las lámparas exteriores con detector de movimiento. Son mucho más sencillas de colocar: solo tienes que retirar la luminaria que tengas en ese punto e instalar el nuevo modelo. Enciende el interruptor y déjalo en posición ON, para que el sensor se encargue de activar o apagar la bombilla.
Instalar un sensor de movimiento es una mejora sustancial para el hogar, que lo hará más cómodo y seguro. No te pierdas los consejos y proyectos paso a paso del blog de BAUHAUS: descubrirás muchas otras propuestas, perfectas para renovar y decorar tu casa, y hacerla más acogedora. ¡Ponte manos a la obra!
Preguntas frecuentes sobre como instalar un sensor de movimiento
El mejor lugar para instalar un sensor de movimiento en el hogar suele ser la entrada. También es interesante colocarlos en pasillos, garajes y escaleras.
Los sensores de movimiento son muy sencillos de instalar. Si los colocamos nosotros mismos, solo tendremos que pagar el precio del dispositivo. Un electricista suele cobrar un promedio de 30-40 € en mano de obra, por punto de luz.
Los sensores se activan cuando detectan una presencia. Puede tratarse de una persona o un animal. Si lo colocamos en el exterior, hay que asegurarse de que no hay ramas o toldos cercanos que puedan ser detectados por el dispositivo.
Lo más aconsejable es elegir sensores con un radio de alcance entre 8 y 10 metros.
Equipo BAUHAUS
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