Una amoladora es una herramienta que, a lo largo del tiempo, ha ido recibiendo muchos términos pero, oficialmente, es una máquina de corte y una herramienta esencial para tener en todo taller; otros nombres que recibe son radial, moladora, esmeril angular o rotaflex.

Aun así, todos los nombres mencionados previamente tienden a decir lo mismo: herramienta de alta velocidad que sirve para cortar, pulir y esmerilar. Es indispensable para cortar metal, alisar soldaduras y eliminar el óxido. Se podría decir que las posibilidades de esta herramienta son casi ilimitadas.

Encontrar el tamaño correcto de la amoladora es esencial y básico

Las amoladoras tienen tres tamaños comunes: 115, 125 y 230 milímetros. Los dos primeros tamaños son los más comunes para trabajar el metal y para trabajos relacionados con el bricolaje aunque los profesionales del sector a veces usan el tamaño más grande para los mismos trabajos.

Por otro lado, también existen diferentes tipos y formatos de discos y cepillos. Estos se fijan al eje central de la amoladora y se fija con la llave y el botón de bloqueo del eje. Las etiquetas de los discos siempre se apuntan hacia abajo.

Cortar, pulir, esmerilar

Después de haber decidido el tamaño con el que quieres trabajar, es momento de decidir que propósito va a tener la amoladora: ¿qué material vas a trabajas: piedra, acero o acero inoxidable? A continuación, también tendrás que determinar si cortarás, pulirás o esmerilarás el material a trabajar.

Otra opción a tener en cuenta son los cepillos, los cuales son aptos e ideales para quitar superficies oxidadas o madera. ¡Existe un disco y un cepillo adecuado e ideal para cada tarea que tengas que realizar en el taller!

Seguridad a la hora de usar la amoladora

Una amoladora es una herramienta que funciona con energía eléctrica y, por lo tanto, se convierte en una herramienta peligrosa que puede llegar a girar a una velocidad de hasta 11.000 rpm. En consecuencia, cuando se trabaja con esta herramienta, tienes que  tomar algunas medidas de seguridad a parte de usarla con precaución y cuidado.

El primer paso es configurar la protección contra chispas para que, cuando estas salten, no puedan incendiar nada a su alrededor. También es igual de importante la protección personal: las gafas protectoras, la protección auditiva, guantes y ropa a prueba de chispas.

¡Recuerda tener la amoladora desenchufada y apagada correctamente cuando tengas que cambiar los discos o los cepillos que tengas que usar!

Trabajar con la amoladora

A la hora de trabajar con la amoladora es importante que siempre uses las dos manos para trabajar con más seguridad. ¡Te recomendamos añadir el asa adicional a la amoladora para trabajar con más comodidad! Igual de importante es fijar siempre bien el disco o el cepillo con el que vayas a trabajar antes de encender la amoladora.

Normalmente, se suele trabajar encima de un banco de trabajo por comodidad y seguridad. En el caso que vayas a usar un disco de corte, usarás la amoladora en un ángulo recto. En el caso que hayas escogido un cepillo o una pieza más gruesa para lijar, se suele trabajar en un ángulo de 30° con respecto a la pieza a trabajar.