Las frutas, al igual que las verduras, no solo son deliciosas, sino que también son increíblemente saludables y, además, contienen vitaminas y nutrientes esenciales para nosotros. En este sentido, ya no es necesario que las compres en el supermercado, porque ¡puedes cultivar nuevas verduras y frutas a partir de sus propias semillas! Y, además, ¡estarán libres de contaminantes y pesticidas! En este post, te contaremos cómo cultivar fruta en maceta en casa a partir de semillas de otras ya compradas. En nuestro caso, usaremos como ejemplo la fruta de la pasión.
Beneficios de cultivar fruta en maceta en casa
Antes de explicar paso a paso cómo cultivar frutas en casa, vamos a analizar cuáles son las ventajas de tener fruta en maceta:
- Tienes frutas frescas y deliciosas siempre a tu alcance: imagina salir al jardín o al balcón y recoger unas jugosas fresas o ciruelas directamente del árbol. ¡Eso es vivir en el paraíso frutal! Además, cultivar la fruta en maceta suele tener un sabor más intenso y natural.
- Dispones de un control total sobre pesticidas y químicos: al cultivar tus frutas en casa, tú decides qué tipo de fertilizantes o pesticidas usar, o incluso puedes optar por métodos orgánicos. Así, te aseguras de tener frutas más saludables y libres de residuos químicos.
- Participas en la economía verde: cultivar frutas en casa puede ser una forma efectiva de ahorrar dinero a largo plazo. Además, al tener tu fruta en maceta, reducirás la huella de carbono al no depender tanto de las importaciones que llegan desde lejos.
- Haces ejercicio sin ir al gimnasio: ¿sabías que cuidar tus plantas y árboles es una excelente manera de mantenerse activo? Excavar, plantar, podar y recolectar son actividades que te mantendrán en forma sin necesidad de pagar una membresía de gimnasio.
- Conectas con la naturaleza: plantar y cuidar árboles frutales te conecta directamente con la naturaleza. Observar cómo crecen y dan frutos es una experiencia única y relajante que te ayudará a desconectar del estrés diario.
- Enseñas a los peques: si tienes niños en casa, cultivar fruta en maceta es una oportunidad perfecta para enseñarles sobre la importancia de la alimentación saludable, el respeto por la naturaleza y cómo funciona el ciclo de la vida de las plantas.
- Tienes una variedad de opciones: con tu propio huerto de frutas, puedes cultivar variedades únicas y raras que quizás no encuentres en el supermercado. ¡Sorprende a tus familiares con frutas exóticas cultivadas en casa!
Como ves, cultivar frutas en casa no solo es beneficioso para tu salud y tu bolsillo, sino que también es una experiencia enriquecedora. Esta actividad te conecta con el planeta y te brinda frutas frescas y deliciosas directamente desde tu propio pedacito de paraíso verde. ¡Anímate a probarlo! Ahora te contamos cómo ponerlo en práctica.
Cómo cultivar fruta en maceta: el ejemplo de la fruta de la pasión
Un buen ejemplo para aprender a cultivar fruta en maceta es la fruta de la pasión. Con el grado de madurez adecuado, la fruta de la pasión es una verdadera delicia culinaria. En términos de sabor, la fruta de la pasión ofrece el equilibrio perfecto entre el dulce y el ácido, por lo que es intensamente aromática. En resumen, ¡es una fruta extraordinaria que puedes cultivar tú mismo en casa!
Importante: ¡las pasionarias no son frutas de la pasión! Si bien es cierto que ambas frutas pertenecen al género de las flores de la pasión, son muy distintas en cuanto a sabor. La fruta de la pasión es dulce y ligeramente ácida; en cambio, la pasionaria es ácida y ligeramente dulce.
¿Qué materiales vas a necesitar?
- Fruta de la pasión
- Cuchillo afilado
- Tabla de cortar
- Cucharita
- Papel film
- Vaso transparente
- Tierra
- Maceta o recipiente
- Pulverizador con agua
- Papel de cocina
Paso a paso: cómo cultivar frutas de la pasión en casa
A continuación, te explicamos el paso a paso para cultivar fruta de la pasión en casa:
- Prepara la fruta de la pasión
El primer paso es cortar la fruta de la pasión por la mitad con un cuchillo afilado sobre la tabla de cortar; ¡no importa si la fruta no está totalmente madura o si tiene una alta proporción de acidez! Lo más importante son las semillas que contiene la fruta de la pasión en el interior. Por ello, después de haber cortado por la mitad la fruta de la pasión, coge una cucharilla y separa cuidadosamente las semillas de la propia pulpa de la fruta.
- Limpia las semillas
¡Ahora llega una tarea un poco más complicada! Una vez que hayas quitado todas las semillas, es momento de limpiarlas, ya que tienen que quedar completamente libres de pulpa de la propia fruta de la pasión. Parece fácil, pero algunas veces la pulpa queda extremadamente adherida a la semilla y cuesta retirarla.
Para realizar esta tarea, tienes dos opciones: la primera es intentar eliminar los restos de pulpa de las semillas con la ayuda del papel de cocina, y la segunda es un poco menos convencional, pues es limpiar las semillas con la boca. Independientemente del método de limpieza que elijas, las semillas deben quedar completamente limpias y secas para poder continuar, ya que, de lo contrario, las semillas podrían desarrollar moho. - Planta las semillas
Una vez que todas las semillas de la fruta de la pasión están completamente limpias y secas, ¡es momento de plantar! Para plantar las semillas de fruta en maceta, coge un recipiente o una maceta lo suficientemente grande y llénalo de tierra. Después, coloca las semillas en la tierra y cúbrelas con una capa fina de tierra.
- Humedece las semillas
La fruta de la pasión es una fruta que necesita mucha agua, especialmente durante su fase de crecimiento. No obstante, ¡ten cuidado!: el encharcamiento o demasiada agua puede provocar daños en la semilla. Te recomendamos que uses un pulverizador lleno de agua para ir humedeciendo la tierra de manera uniforme.
- Crea las condiciones óptimas para el crecimiento de la fruta de la pasión
La fruta de la pasión solamente crece y se desarrolla bien a una temperatura de 25 a 30 grados, por lo que es importante crear este microclima para la fruta. Para ello, cubre la maceta o el recipiente escogido con papel film. De esta manera, el calor que haya dentro aumentará y las semillas de la fruta de la pasión podrán crecer y prosperar, incluso a una temperatura ambiente y sin la necesidad de un invernadero.
Al cubrir la maceta con papel film, asegúrate de envolverlo de tal manera que quede hermético. Esta será la única manera de mantener el microclima necesario para que crezca la fruta en maceta en condiciones óptimas.
Consejo: a pesar de que a la fruta de la pasión le gusta el clima tropical, tampoco puede prescindir completamente del oxígeno. Aquí, la palabra clave es “ventilación”; es decir, cada 2 o 3 días es importante que retires el papel film del recipiente o de la maceta durante unas 2 horas para que la planta reciba suficiente oxígeno. De esta manera, también evitarás la formación de moho dentro de la propia tierra.. - Manten la fruta de la pasión
A parte de la ventilación regular, la correcta humedad de tu fruta de la pasión también es importante. La tierra nunca debe estar completamente seca; es decir, siempre tiene que estar ligeramente húmeda. Al igual que cuando siembras las semillas, es importante ir humedeciendo la tierra para la fruta en maceta con un pulverizador con agua. Así, podrás ir evaluando el suministro de humedad necesario y podrás regar tus semillas de manera uniforme.
Las primeras plántulas pequeñas crecerán 14-20 días después de haber plantado las semillas. A partir de ese momento, podrás quitar por completo el papel film y colocar el recipiente o maceta en un lugar cálido junto a la ventana.
Fruta en maceta: ¿cuál es la más fácil de cultivar en casa?
La fruta más fácil de cultivar en maceta dependerá de varios factores, como el clima, el espacio disponible, la disponibilidad de luz solar y la atención que puedas dedicar al cuidado de la planta. Sin embargo, algunas de las frutas más sencillas de cultivar en maceta incluyen:
- Fresas: son ideales para cultivar en macetas debido a su tamaño compacto y su capacidad para adaptarse a espacios pequeños. Además, producen frutos rápidamente y son bastante resistentes.
- Fresas colgantes: esta variedad de fresas se caracteriza por sus largos corredores que pueden crecer colgando de la maceta, lo que las hace ideales para colgar en balcones o terrazas y maximizar el espacio disponible.
- Limones o limas enanas: los cítricos enanos, como los limoneros o los limoneros kumquat, son excelentes opciones para cultivar fruta en maceta. Solo necesitan un lugar soleado y suficiente agua para crecer y producir frutos.
- Hierbas frutales como la frambuesa o el arándano: algunas variedades de hierbas frutales se adaptan bien al cultivo en macetas y pueden ofrecer una cosecha sabrosa en un espacio limitado.
Cultivar fruta en maceta, como la fruta de la pasión, puede resultar gratificante porque permite disfrutar de sabores exquisitos y la satisfacción de cultivar tu propia fruta tropical. Siguiendo estos pasos, y con los cuidados adecuados, puedes incorporar un toque exótico en tu hogar.
¿Qué te ha parecido lo sencillo que es cultivar frutas en casa? Recuerda que en BAUHAUS siempre puedes encontrar todo tipo de materiales y la ayuda de nuestro equipo de profesionales.
Preguntas frecuentes sobre cultivar fruta en maceta en casa
La mayoría de las frutas necesitan al menos 6 horas de luz solar directa al día. Asegúrate de ubicar tus plantas en un lugar con buena iluminación.
Sí, algunas variedades son adecuadas para el cultivo en interiores o en climas más frescos, siempre y cuando se brinde el entorno adecuado.
Riega regularmente, evitando el encharcamiento. Durante los períodos secos, aumenta la frecuencia de riego.
Equipo BAUHAUS
Equipo BAUHAUS. Las mejores ideas e inspiraciones para tu hogar: bricolaje, reformas, decoración, iluminación y jardín.
Artículos relacionados
No hay comentarios
Todavía no hay ningún comentario en esta entrada.
Comparte tu experiencia