El primer paso es elegir la valla metálica, la cual ha de adaptarse a los requerimientos de tu jardín, pues las hay de diferentes diseños y tamaños. Tienes que tener en cuenta todas las piezas que necesitarás: número exacto de paneles, puertas simples o dobles, postes y todos los accesorios necesarios.

Una vez que has elegido la valla metálica, lo primero que debes hacer es colocarla. Para ello, con la ayuda de estacas y un tendel tensado, debes marcar por dónde debe pasar, incluida la posición exacta de todos los postes.

A continuación, con una pala y una herramienta para perforar, haz los agujeros para los cimientos correspondientes (por ejemplo, si las rejas miden 200 cm de ancho, la distancia entre los agujeros para los cimientos debe ser de 202 cm y estos deben medir 30 × 30 cm y tener una profundidad de 50 cm).

Ayudándote del soporte de montaje, fija un panel de reja (base lisa) a cada lado del poste. Echa hormigón en los agujeros para los cimientos (hasta una altura de unos 10 cm) e introduce el panel de valla montado; nivélalo (con un nivel de burbuja) y estabilízalo con una estructura provisional. A continuación, acaba de llenar los agujeros con hormigón y compáctalo. Coloca debidamente los demás elementos: siguiendo el tendel, fija un panel de reja al poste ya colocado con el clip de montaje y hormigona el segundo poste.

Si un elemento es demasiado largo, acórtalo de la manera siguiente: toma medidas y corta la reja con una amoladora (colocando un poste de madera debajo). Protege los puntos de corte contra el óxido; por ejemplo, con un barniz en espray.

Si un panel debe fijarse a una pared para cerrar la valla (por ejemplo, del garaje), debes doblarlo en ángulo recto. A continuación, corta con la amoladora los rebordes en el punto por el que hay que doblar el panel. Ahora ya puedes doblar el panel con la ayuda de una tabla y de tu propio peso. Una vez doblado, ya puedes fijar el panel a la pared con una escuadra de acero inoxidable especial.

Monta la cerradura, el picaporte y los accesorios de la puerta de jardín y, a continuación, hormigona los postes correspondientes como se ha descrito (la colocación debe ser precisa). Luego coloca las bisagras y los anillos espaciadores en los postes y atorníllalos desde atrás.Coloca la puerta de jardín y sujétala al poste por el lado que quedará fijo con dos llaves de tuerca.